La Cabeza (<) y la cola (>) del Dragón
Los Nodos Lunares
Todos los meses la Luna describe un círculo alrededor de la Tierra, atravesando dos
veces el plano de la eclíptica: una vez cuando asciende de Sur a Norte y después cuando
desciende de Norte a Sur.
Aquel lugar en que la cruza de Sur a Norte es llamado Nodo Ascendente y lo
reconocemos como el Nodo Norte o Cabeza del Dragón. Este punto está sujeto a una
influencia benéfica lo cual propulsa y promueve todos los asuntos bajo su influencia.
El otro punto en que la cruza de Norte a Sur es el Nodo Descendente y lo conocemos
como Nodo Sur o Cola del Dragón. El Nodo Norte y el Nodo Sur caen siempre en casas y
signos opuestos.
Los nodos de la Luna relacionan en un sentido simbólico al Sol, la Luna y la Tierra. Así
las casas que están señaladas por los Nodos indican las esferas de la vida donde podríamos
tener éxito en nuestro intento de integrar en la personalidad, los principios complementarios
de la Luna y el Sol.
La casa ocupada por el Nodo Sur es una esfera en la cual, para bien o para mal
actuamos instintivamente y por hábito, entregándonos a cualquier necesidad emocional es
decir, según los principios lunares regresivos, repetitivos, emocionales y perezosos. Se lo
considera a este Nodo como saturnino en sus efectos y obstruye todo aquello que con él se
relaciona.
La casa en donde esta emplazado el Nodo Norte de la Luna nos exige que ejercitemos
el heroico principio Solar. Este sector de la vida es un ámbito de la experiencia nuevo, lo que
debemos explorar y conquistar. Requiere voluntad, resolución y determinación, lo que nos
indica un comportamiento autogenerador más que reactivo. El Sol resistiéndose a la atracción
del pasado tiene el poder de provocar cambios, por tanto, a diferencia de la Luna es un
“órgano de futuro”.
Si nos cultivamos en este campo traemos potencialidades aún no ejercitadas y
aumentamos nuestras habilidades.
Podemos establecer una analogía entre ambos Nodos y el cerebro humano. En este
sentido vemos que una parte del cerebro almacena lo que es innato e instintivo lo que sirve
para mantener el organismo. En tanto la otra constituye una adquisición evolutiva más
reciente.
Para acceder a la casa donde está el Nodo Norte tenemos que vencer la tendencia a
demorarnos demasiado en el terreno de la vida que sugiere el Nodo opuesto, que es el reino
de las capacidades ya cultivadas.
Muchas de las capacidades que indica el Nodo Sur son preciosas y no deben ser
descartadas o descuidadas. Pero es probable que el nativo las siga como un hábito porque
es lo más fácil de hacer. En cambio el Nodo Norte indica un esfuerzo de voluntad consciente.
Cultivar uno y otro Nodo es posible y hasta preferible a volcarnos hacia uno u otro. Pero
si se cultiva en exceso el campo de experiencia asociado al Nodo Sur, a expensas del Nodo
Norte el crecimiento se demora y no vamos cosechando nada nuevo en nuestra vida.
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Curso de Astrología básico Página: 106 - Fraternidad Rosacruz Max Heindel del Uruguay
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