Nº 30. — DEBILIDAD DE LA ESPALDA Y DE LAS PIERNAS,
AFECCIONES DE LOS OJOS Y SORDERA
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Buenos aspectos: La Luna sextil con Urano y Júpiter; el Sol sextil con
Marte, y Venus trígono con Júpiter.
Malos aspectos: Saturno en oposición con Neptuno; el Sol y Mercurio en
cuadratura con Júpiter y Urano.
Éste es el horóscopo de un adolescente nacido el día 6 de septiembre de
1900, a las seis de la mañana, y la dolencia sentida es la debilidad posterior y de
las piernas que se oponen a sus movimientos normales.
Astrológicamente vemos que esto es debido a diversas causas. En primer
lugar hay los cuatro signos comunes en los ángulos; el signo de la casa sexta,
Virgo, está en el Ascendente que gobierna la constitución del cuerpo, y éste es un
punto importante por esta razón. Esto en sí indica que la naturaleza es un tanto
indolente y la tendencia a ceder y entregarse muy fácilmente. Encontramos
también a Mercurio, el regente del Ascendente, en la casa duodécima, que denota
los hospitales y las enfermedades crónicas, estando en cuadratura con Júpiter y
Urano, que están situados en Sagitario, el signo que gobierna las caderas y el
gran nervio ciático. El Sol, el dador de vida, está también en cuadratura con
Urano, el planeta de la irregularidad, que está en conjunción con Júpiter en
Sagitario, y finalmente, Saturno, el regente de la estructura huesosa y sus
articulaciones, está colocado en Sagitario en oposición con Neptuno, en Géminis.
Todas estas configuraciones tienden naturalmente a traer las condiciones
enfermizas manifestadas si no se hace nada para prevenirlas; pero en este caso,
con cuatro signos flexibles y comunes en los ángulos con el dador de la vida (el
Sol) en sextil con Marte, el planeta de la energía dinámica y con la Luna sextil con
Júpiter, el planeta que gobierna la sangre arterial, es perfectamente posible el
obtener mejoría por medio de ejercicios que desterrarán las condiciones
perezosas y contenidas.
Pero nosotros hallamos, además, otra debilidad de naturaleza grave, latente
en este horóscopo. Urano está en conjunción con la estrella nebular Antares en
los 8 grados de Sagitario, en cuadratura con el Sol y Mercurio. Esto implica un
grave peligro para la vista y para los oídos debido a que Mercurio está en la casa
duodécima. Todos estos síntomas pueden ser detenidos si se aplica el remedio
preventivo oportunamente. Nosotros lo dudamos debido a que este paciente, por
no poderse dedicar a otra cosa, es un lector inveterado, y esto ocasionará la
manifestación del tal trastorno si persiste en su hábito. El masaje de la cabeza en
la región de los ojos y de las orejas, y el ejercicio de las piernas y del cuerpo
ayudarían a restablecer la salud de este jovencito.
Un médico con Tauro en el Ascendente, cuyo Saturno no se hallara en la
casa sexta del paciente, tendría probablemente el mayor éxito en el tratamiento de
este caso.
***
del libro "El Mensaje de las Estrellas" de Augusta Foss de Heindel y Max Heindel
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