MUERTE

EL CORDÓN DE PLATA Y LOS ÁTOMOS SIMIENTES

CAPÍTULO IV

MUERTE

La muerte del cuerpo físico tiene lugar cuando, como resultado del colapso del Arquetipo, el cuerpo vital se colapsa también completamente y el átomo-simiente del ápice del corazón se rompe, saliendo el Ego fuera del cuerpo en su aura astral y llevándose la matriz etérica consigo. Cuando el átomo-simiente se rompe, esto es el resultado de que el Ego se lleva consigo las "fuerzas" de ese átomo que contiene el registro permanente de la evolución entera del Ego, desde el mismo principio del período de Saturno. El Cordón etérico todavía está adherido a la concha rota del átomo-simiente en la punta del corazón, sin embargo y por un período de aproximadamente tres días y medio después de la muerte, el cuerpo vital envuelto en el cuerpo de deseos, puede todavía ser visto flotando por encima del cuerpo. El "doble" flotante está sumergido en profundo sueño. Durante este tiempo revisa su panorama de la vida recién terminada que ha sido extraída del átomo-simiente del corazón, o más precisamente, del Éter Reflector de ese átomo.

En el momento de la muerte el cuerpo vital puede ser visto saliendo del cuerpo a través de la parte más alta de la cabeza y luego formándose otra vez con la semejanza que la persona tenía en vida, así como flotando horizontalmente por encima del cuerpo muerto. El Cordón de Plata también sale con todo el cuerpo vital, pero las fuerzas del átomo-simiente del corazón salen por la vía del nervio pneumogástrico y el Cordón es visto proyectándose hacia fuera desde la parte de atrás de la cabeza. El cuerpo vital entero (Éteres Químico y de Vida) así como el Cordón de Plata entero y todos los átomos-simientes, suben y salen fuera del cuerpo; pero, como se dijo, el Cordón todavía está adherido al átomo-simiente roto en el corazón.

Max Heindel habla de esta condición, conforme aparece en el intervalo de tres días después de la muerte, cuando el Ego está flotando en sus cuerpos etérico y de deseos, por encima del cuerpo denso "muerto" en la cama, como sigue:

Cuando los vehículos superiores han abandonado el cuerpo denso, todavía están conectados con él, por medio de un Cordón Plateado delgado y resplandeciente, muy parecido a dos números "seis" invertidos, uno hacia arriba y el otro horizontal, conectados los dos en los extremos de los ganchos.

Uno está unido al corazón por medio del átomo-simiente: es la ruptura del átomo-simiente la que hace que el corazón se detenga. El Cordón mismo no es roto hasta que el panorama de la vida pasada, contenido en el cuerpo vital ha sido revisado... El Cordón de Plata se rompe en el punto donde se unen los "seis", permaneciendo la mita con el cuerpo denso (y doble etérico) y la mitad con los vehículos superiores. Desde el momento en que se rompe el Cordón, el cuerpo denso está completamente "muerto". La ruptura del átomo-simiente en el corazón, libera al cuerpo vital y éste, junto con el cuerpo de deseos y la mente, flotan por encima del cuerpo visible por alrededor de uno a tres días y medio, mientras que el Espíritu está ocupado en revisar la vida pasada. Estas escenas están en los Éteres Luminoso y Reflector que están adheridos al átomo-simiente del corazón y esta substancia etérica es grabada en el cuerpo de deseos durante la vida panorámica.

Después de la segunda "ruptura", que es la ruptura del Cordón en el punto de unión de los dos "seis", la matriz de los dos éteres inferiores permanece con el cuerpo denso, al cual está unido por medio de la parte inferior del Cordón de Plata y se descompone sincrónicamente con él.

El doble etérico mismo está rodeado por una especie de aura de átomos -un humo o niebla- mientras acompaña al cuerpo liberado. Esto es conocido en la leyenda como la "candela del cadáver" a causa de que es débilmente luminoso. Ha sido visto flotando por encima de las tumbas y en los mausoleos, algunas veces semejando una nube oblonga de tono azulado, grisáceo o verdoso. Algunas veces la matriz del cuerpo vital se ve a la mitad del aura etérica nebulosa, descomponiéndose con el cuerpo en la tumba y esto ha contribuido indudablemente a la tradición de los vampiros.

Los ocultistas creen que los ritos funerarios no deberían tener lugar sino por lo menos después de tres días y medio posteriores a la muerte, y debería conservarse el cuerpo en algún lugar familiar, o por lo menos en un lugar ameno y armonioso, durante cuyo tiempo el Ego pudiera tener la oportunidad de terminar su retrospección de la vida y "despertar" al mundo espiritual tranquilamente. Sin embargo, no importa donde o en qué tiempo "despierte", siempre habrá amigos y auxiliares angélicos con él. No estará solo.

Una vez terminado el panorama, por la ruptura del Cordón de Plata en el átomo-simiente del cuerpo vital, el Ego es libre de alejarse en sus vehículos superiores. Su aura ha tomado la apariencia del cuerpo que recién ha dejado, pero este cuerpo no es el doble etérico que sigue al cuerpo y se descompone sincrónicamente con él. Este nuevo cuerpo -de los éteres superiores y el cuerpo de deseos- todavía se parece al hombre tal como era en la tierra, porque el Ego continúa pensando de sí mismo en la forma acostumbrada. Continuará creyendo que él es tal como era en la Tierra, durante su permanencia en el mundo del Deseo inferior sufriendo purgación. Está demás decir que el Purgatorio no es un lugar temible, excepto para los seres humanos muy bajos. Es más bien comparable a un hospital o asilo que a una prisión. Los Egos que están allí son libres de vivir lo que a ellos les parece ser una vida normal y muchos de ellos pasan a través de las nociones de quehaceres domésticos por algún tiempo después de la muerte. A su tiempo ellos superan los deseos así como los sueños y los antojos terrenos y por este tiempo la contraparte inferior se ha deshecho, de modo tal que queda únicamente la cabeza de la imagen corpórea. Precisamente antes o inmediatamente después de que el Ego asciende al primer Cielo, la cabeza también desaparece. Parte de la Bienaventuranza del cielo es tener la clase de cuerpo y personalidad que deseaba tener estando en la tierra; así es que obviamente la apariencia del Ego en el primer Cielo es una imagen corpórea idealizada y rara vez tendrá la apariencia previamente conocida en la Tierra; sólo cuando el Ego desea establecer comunión con los seres queridos condescenderá a tomar una vez más la apariencia del cascarón descartado.

Cuando el Ego deja el Purgatorio y la región de los sueños y deseos, está ocupando un aura compuesta de la substancia de las tres Regiones superiores del Mundo del Deseo; las Regiones de la Vida Anímica, de la Luz Anímica y del Poder Anímica. Todavía tiene los átomos-simientes de su recién terminada vida y la misma aura mental y cuerpo de deseos, pero purificados. Sin duda también debe estar esa parte del Cordón de Plata que está hecha de substancia mental, porque la mente y el cuerpo de deseos continúan funcionando como una unidad hasta que este cuerpo astral superior es abandonado y el Ego se eleva al segundo Cielo.

Uno debe lógicamente suponer que al final de la experiencia Purgatorial el cuerpo de deseos y el segmento del Cordón astral son desechados juntos; y un desecho similar del Cordón de materia mental debe ocurrir al tiempo de la ascensión del Ego al segundo Cielo. Solamente los átomos-simientes y las esencias anímicas continúan con el Ego desde este momento, incluyendo alguna porción espiritualizada de los Éteres de Luz y Reflector.

Después de que el Ego asciende a la región del Pensamiento Concreto (Segundo Cielo), rara vez piensa de si mismo que es el ser que vivió últimamente en la tierra, aunque todavía puede retener la apariencia de una cabeza o asumirla de vez en cuando. El Ego está ahora con las fuerzas de la Naturaleza y las Jerarquías Celestiales, preparando su propio ambiente mundano futuro encarnado en la tierra, de modo que, como dice Max Heindel, los muertos nos ayudan verdaderamente a vivir.

El Ego retiene los átomos-simientes durante la permanencia en el Tercer Cielo al cual se eleva después de que la cubierta mental ha sido desechada -pero la estancia aquí es usualmente breve- y cuando retorna al renacimiento, en la matriz las partes del Cordón de Plata brotan de nuevo de los puntos donde se implantan los átomos-simientes.

Algunos ocultistas han pensado que el Cordón de Plata es en realidad una especie de contraparte etérica del nervio pneumogástrico o vago, que es uno de los más importantes nervios del sistema simpático, porque su trayectoria en el cuerpo se parece muchísimo a la del nervio vago.

El errante sendero del segmento de materia mental del Cordón de Plata bien podría ser correlativo del sendero del vago en algunas partes de su crecimiento cuando menos. El diagrama del Cordón de Plata incluido en el capítulo I es una simplificación. El segmento de materia mental del Cordón va del seno frontal hacia abajo entre las glándulas pineal y pituitaria, tocando la tiroides y el timo, cruzando a la izquierda hacia el bazo y hacia atrás a través del cuerpo a las adrenales y al hígado, donde es conectado con el átomo-simiente del cuerpo de deseos. Esto ciertamente involucra una semejanza aproximada con el trayecto del nervio vago y una conexión esotérica es indicada en la afirmación de Max Heindel de que el átomo-simiente viaja hacia arriba, a la muerte, a lo largo del nervio pneumogástrico, que toca el corazón.

Se nos dice que la obra de la Iniciación incluye la liberación del Ego en todos aquellos puntos en que están situados los átomos-simientes y por lo tanto también en los puntos en que Cordón de Plata está fijado en el cuerpo y sus cubiertas. (Esto es en adición al trabajo con el Vestido Dorado de Bodas y con el Fuego-Espíritu Neptuniano).

Obsérvese que el corazón como órgano físico, está colocado directamente en el centro del pecho, pero está inclinado hacia el lado izquierdo; de modo que el ápice o punta del corazón, sobresale de debajo del hueso del esternón y por esto es por lo que sentimos más claramente y lo oímos latiendo allí. En el ápice está colocado el átomo-simiente del cuerpo físico, como ha sido indicado. Algún día el corazón estará derecho y vertical en el pecho; la punta que ahora se dirige hacia la izquierda se moverá hacia el centro del cuerpo y el corazón se alineará con los órganos de la visión espiritual de la cabeza. En la meditación la parte superior del corazón que está en el centro del pecho es la más importante y los estudiantes a menudo sienten las corrientes que son activas en esa área.

***

del libro "Temas Rosacruces" Tomo Segundo, de la Fraternidad Rosacruz de Max Heindel